Javier Arizcuren proviene de una familia de viticultores de Quel en La Rioja Baja, Arquitecto de profesión, entre sus proyectos se encuentran las bodegas Marqués de Terán y Finca Los Arandinos y, más recientemente, la restauración de las cuevas históricas del siglo XVI y del XIX. Conjuntos de construcción del siglo XIX en las Bodegas Conde de los Andes en Ollauri 2009 después de estudiar viticultura y enología en la Universidad de La Rioja y realizar diversos viajes a zonas vitivinícolas nacionales e internacionales,
empezó a elaborar una pequeña cantidad de vino en el sótano de la casa familiar.
En 2011 se hace cargo de la finca familiar y comienza a mostrar su potencial y el carácter diferencial de los vinos de Quel.
De todos los viñedos que componen el patrimonio vitícola familiar, sólo se incluyen en el proyecto Arizcuren aquellas parcelas con mayor potencial vitícola. Se trata de parcelas con edades comprendidas entre 30 y 120 años, realizadas principalmente en el sistema de Gobelet con características de suelo, altitud y orientación óptimas para el cultivo de la vid. Estas parcelas se trabajan de forma ecológica, libres de herbicidas, pesticidas y fertilizantes sintéticos. Al final del ciclo se elige una fecha de vendimia que difiere de un año a otro, en función de cuando la uva alcanza el máximo equilibrio entre fruta, acidez, carga de polifenoles, etc. Los racimos obtenidos pasan a ser una especie de dietético en el que se pueden leer los vaivenes del clima que los han hecho crecer y madurar. Las uvas se seleccionan cuidadosamente del viñedo y se transportan en cajas de plástico para garantizar que se preserve la máxima integridad antes de ingresar a los tanques de procesamiento, completando así el trabajo de todo un año.
Valdetrillo es un viñedo en pie franco, de edad indeterminada, que muestra en sus carnes las cicatrices de la evolución de la viticultura en el siglo XX; cuando los animales dieron paso a los tractores en los viñedos de La Rioja, el 50% de sus vides fueron arrancadas. Pero lo importante es que sigue ahí, con sus heridas, pero regalándonos año tras año magníficas uvas con las que hacer un gran vino.
Mazuelo es una variedad que históricamente ha formado parte de los grandes vinos de Rioja, siendo en gran medida responsable de su longevidad. En La Cantera está plantado en vaso, a más de 550 metros de altitud sobre el nivel del mar, en suelos arcillosos, abundantes en cantos rodados y de baja fertilidad. La viticultura utilizada tiene como objetivo la obtención de uvas de calidad; bajos rendimientos en torno a los 4.000 Kg/Ha, deshojado basal en la cara noreste, óptima maduración fenólica de piel y pepitas, sin alcanzar excesivos grados probables. El proceso de elaboración del vino pretende ser lo más respetuoso posible con las características propias del vino, reduciendo al máximo los aportes exógenos.
El vino obtenido tras el paso por cuba es mucho más redondo y acabado que los envejecidos en barricas de madera, mostrándose como el más puro reflejo de lo que es la variedad. Con este vino tengo la oportunidad de realizar un trabajo muy didáctico para dar a conocer las características de la variedad con el fin de potenciar su valor dentro de la DO y evitar la tendencia a reducir la superficie cultivada arrancando los viñedos históricos existentes.
Pasado, presente y futuro de Rioja Oriental. Pasado, representado por las variedades tradicionales, garnacha y mazuelo, presente, por la ya mayoritaria tempranillo y futuro, un futuro construido en torno a la unión de todas ellas, siguiendo la tradición de mezclar variedades para elaborar grandes vinos. Tempranillo, Garnacha y Mazuelo procedentes de viñedos del pueblo de Quel a una altitud de entre 530 y 600 metros sobre el nivel del mar, vendimiados a mano. Envejecido en barricas de roble francés y depósitos de hormigón.
La garnacha era la variedad mayoritaria en La Rioja Baja hasta hace unos 30 años. Arizcuren Strictly Garnacha pretende mostrar las bondades de esta variedad en un lugar concreto, la vertiente norte de la Sierra de Yerga y su idoneidad para el cultivo. Para ello, se trabaja con algunos de los pocos viñedos viejos que quedan, por un lado buscando un vino representativo, y por otro poniendo en valor el conjunto formador varietal: un sistema de conducción en vaso y una zona; la de Sierra de Yerga. De esta manera quizás se pueda revertir el proceso de "desertificación" de los antaño históricos viñedos de garnacha que existieron en esta zona. El vino busca ser expresión tanto de la variedad como del lugar donde crece, por ello en el proceso no se utilizan productos exógenos (salvo una pequeña cantidad de azufre), y la madera se utiliza exclusivamente para el proceso de estabilización del vino. sin que quede excesivamente marcado.
La mazuelo es una variedad que históricamente ha formado parte de grandes vinos de Rioja, siendo en gran medida responsable de su longevidad. Viñedo en sistema de vaso, a más de 550m de altitud, en suelo arcilloso con abundante canto rodado y baja fertilidad. La viticultura utilizada busca la obtención de uvas de calidad; bajos rendimientos en torno a los 4.000 kg/ha, deshojado basal en la cara noreste, óptima maduración fenólica de piel y pepitas de uva, sin alcanzar excesivos grados probables. La elaboración busca ser lo más respetuosa posible con las características propias del vino, minimizando las aportaciones exógenas.